Me acosté pensando, tratando de no pensar, de no sentir, intente dormirme con una idea de paz, pero me dormí llorando. Soñé, soñé que otra vez me lastimabas, comprobé que los mecanismos de represión y sueños son una realidad. Me desperté a mitad de la noche, triste, queriendo decir basta a eso, pudiendo poner punto final a mi cabeza, a mi corazón. Me dormí, triste. Me desperté angustiada, distraída, temblando.
¿y donde estas? ¿por qué llegamos hasta acá?
No hay nosotros, definitivamente no.
Estoy yo, vos no se dónde estás. Pero hace tiempo que no siendo parte de mi vida. Elegiste irte mil veces.
Y entre mis mil defectos que a veces son virtudes el número 1 debe ser que en las malas voy a estar mucho más.
En cambio vos, te vas. No estoy juzgando, estoy siendo realista. Por qué no me va a causar dolor alguien que me dejó sola. Que se fue buscando alguien más haciéndome sentir que toda mi vida, porque eso estaba dispuesta a darte, no era suficiente. Como puedo querer a alguien que me mintió mirandome a los ojos tantas veces. Como puedo amar a alguien que dice amarme, pero no tiene entre sus prioridades darme la mano para levantarme, darme la mano mientras me levanto, alguien que si no sonrío se va, y no importa si la sonrisa es fingida mientras no tenga que hacer esfuerzo.
Tenes mil cosas buenas, quiZas más. Pero no sabes lo que querés y eso lo arruino todo.
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ideas ajenas que capas servirán